Jacques Personne, autor de El deporte para el niño denuncia la especialización precoz; algo que en mayor ó menor medida sufrimos , aunque cada vez en menor medida , en los deportes de resistencia. Personne afirma que un cadete brillante será un junior mediano y un senior mediocre, si para alcanzar un nivel sobresaliente en edades tempranas hemos tenido que aplicar sistemas de entrenamiento en el joven similares a los de los adultos.

En cadetes , (15 a 16 años),una constante será el trabajo dirigido a la mejora técnica y al desarrollo de la condición física de base. No nos contentaremos con una mejora técnica en el segmento acuático, ni siquiera a desarrollar tan solo el binomio natación/carrera; habitualmente, nos olvidamos que el trabajo técnico dirigido a la mejora del segmento ciclista debe ser un objetivo en si mismo en estas edades. El ciclismo, segmento no muy tenido en cuenta en algunos sectores del nuevo triatlon , es una modalidad de grandes posibilidades a la hora de la mejora de aspectos importantes a nivel psicomotriz, y su entrenamiento por medio de circuitos de habilidad/agilidad/coordinación, eliminará las carencias que probablemente y si en algún caso se accede a un nivel de competición posteriormente, por no hablar del alto nivel, aquejan a algunos de nuestros triatletas, como también a algunos de nuestros mejores competidores ITU.

También podemos ensayar ya la incorporación del intervall training, con algunas modificaciones con respecto al método original de Reindell y Gerschler. Sabemos que los inventores de esta modalidad preconizaban para los adultos la norma de 120 pulsaciones al inicio del esfuerzo y 170 al final. Pero con los chicos no sucede así, por el especial comportamiento de la frecuencia cardiaca en estas edades; el pulso para un mismo tipo de trabajo es superior que en los adultos y , por abajo, habría que dar más tiempo para que la frecuencia bajara a 120; por tanto frecuencias superiores a 180 latidos, con recuperaciones a 130- 140 latidos, sin muestras de agotamiento serían una constante en el intervall en estas edades . Los chicos responden a estos esfuerzos, aún siendo aeróbicos, con una frecuencia cardiaca alta, sin que haya ningún riesgo. Debemos, con la observación, determinar si el joven se ejercita a una intensidad excesiva, pero no cifrando exclusivamente el control a la frecuencia cardiaca. Debemos acostumbranos a este hecho, aunque para muchos esto continúe siendo una paradoja.
4 comentarios:
¡Cuánta razón tienes!
Buen artículo. A ver si alguno se da por aludido... Ni tu ni yo, claro está.
Aunque aquí no venga mucho a cuento, te dejo un enlace sobre la retirada de un gran maratoniano: http://www.cdaltotajo.com/?q=node/193
Saludos, Pablo.
David: como viejo zorro del atletismo, tú también conoces muy bien las distintas connotaciones del entrenamiento en estas edades; además por haber sido atleta desde tus años infantiles-.
De Julio Rey he seguido muy de cerca su evolución estos últimos meses. Una pena que haya tenido que arrojar la toalla, por una lesión muy parecida, (sino igual, y te lo digo porque son los mismos médicos los que nos tratan), a la que yo tengo...
Un abrazo.
Hola Pablo, ¿ cuanta razón tienes!.
En mi época de btt en cadetes y junior vi a un par de buenos ejemplos.
Super cadete, campeon del campeonato y open de España ( en esos momentos solo existia cat junior). No llego a la verdadera categoria junior real.
Otro, gran junior, ganador de algún open de España "no llego" a sub 23.
Y en los mismos año/s, Antonio Hermida, ganando alguna prueba regional, con una bici de "mierda" y con un cartel de busco equipo ( lo encontro y de los buenos), campeon del mundo junior. Por suerte este último a seguido en buena línea.
Saludos.
Está clarísimo lo de la técnica de ciclismo. No hay más que ver la diferencia entre los que han aprendido desde pequeños y los que hemos aprendido a montar de más que adultos.
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