viernes, 26 de octubre de 2007

Imágenes del 13 de octubre, (I)


Amanece en boxes


¿Dónde está mi bici?
¿Me reconocéis?
Público madrugador

El grito salvaje





1ª Transición del grupo de cabeza



Fotos: Mili González

El día esperado,(y V)

Entro en boxes. Esto si es una sauna y no la de mi gimnasio. Para paliar el calor, un voluntario pone sobre mi espalda una toalla húmeda y muy fría, que agradezco; estoy mareado y tardo más de la cuenta en cambiarme.



He trocado ahora el tono de mis palabras. Por qué?? La marathon es más prosaica, porque en el esfuerzo no hay angel del cielo que te ayude, sino todas las fuerzas terrenales.



¿Que hace que la carrera a pie de Hawaii sea tan impresionante?? Una de las razones es el escenario. El Alii Drive, la subida ó bajada final del Palani Road,los campos de lava, el Energy Lab,( un lugar de magnetismo especial que determina finalmente la carrera).


El viento,la temperatura, la humedad, se suman a todos los demás factores y hacen del recorrido un desafío continuamente cambiante. Es un trazado que se puede superar, pero nunca vencer. Si se toman las necesarias precauciones y se corre leyendo perfectamente las sensaciones y anticipándose al desfallecimiento, se puede hacer una carrera honrosa y hasta brillante;si se afronta como un reto frente al cronómetro, resultará que acabaremos indefectiblemente derrotados.



Por eso, pese a que mi carrera no es brillante, voy superando corredores. Primero en el Alii Drive. Animo a mis compañeros españoles , algunos a los que supero y a otros con los que me cruzo. La brutal colina del Palani Road consigo coronarla a tramos andando. A mi vuelta, tras el infierno del Energy Lab, veo la espalda de Rutger Beke, absolutamente vencido por el trazado. Camina.



Pero sin duda,una de las claves finales son las dos colinas que preceden a nuestra entrada en Kona: allí, te derrumbas ó te mantienes. En la primera, yo me mantuve, superando a muchos rivales; en la segunda, me derrumbé, (en la misma colina en la que lo hizo Dave Scott en el 89) y a duras penas alcancé la cima, justo la antesala del descenso final por el Palani.De haber un momento de la verdad, es sin duda este.



Dos curvas a la derecha, tras el tormento de las colinas y llegas al Alii Drive en la última milla, lleno de un nuevo ímpetu desconocido.En la recta final, entre banderas, gritos, decenas de manos tendidas,lo que anteriormente había sido dolor era ya una cálida sensación gozosa. Lo mejor de todo son los últimos doscientos metros, cuando escuchas tu nombre. Has dejado atrás el dolor. Conquistas y te adentras en un nuevo mundo.



Atardece, pero para ti amanece. Naces a una nueva vida que, ahora, comienzas a vivir.

martes, 23 de octubre de 2007

El día esperado, (IV)



Llego al muelle y sigo metido en la lavadora. Necesito sentirme envuelto por el aire y lucho por mi abrigo de viento y sol. Corro por una verde alfombra, y siento como el vientre se contrae y los saltos del corazón. Luego me siento y todo se apacigua, aunque escucho gritos de pura guerra y henos a todos aquí, casi inmóviles, plenos de emoción en ese instante. El reposo es también movimiento.


Salto sobre la bici entre gritos y rayos de sol. Cuesta arriba, Palani Road, y a la derecha Kahalu'u y vuelta por una ratonera desconocida, un aperitivo previo a la Queen K. Pedaleo con ganas y a la vez reserva, buscando el bendito espacio intacto; sabéis de qué hablo.


A la Highway 19 la conozco , y la hablo. Trato de entender los susurros del viento . Una luz insolente roza la parte superior de nuestros cascos, plantando en cada uno de ellos una lengua de fuego. La hora tiene ya mil colores;la vida parece haberse detenido.


Mas adelante nos espera Eolo con fuerza desatada; en Kawaihae, la fuerza del viento nos lleva al centro de la carretera, con rachas febriles y luchamos con todas las fuerzas para controlar la bicicleta. Juego al ataque, a la defensiva, conservo las fuerzas, intento encontrar mi interior, mis sensaciones. Confianza en mi mismo; y sin recompensas. En el verdadero deporte no existe lo que la gente de a pie entiende como recompensa, pero, ¿dónde cabe encontrar lo que aquí se halla?


Viento y calma. Sol y hasta conato de lluvia en Hawi. La vida hermosa se debe siempre a la condición de las fuerzas opuestas . Felicidad, sufrimiento, sabiduría, locura, conocimiento, despreocupación... todo ello me pertenece y quiero tenerlo todo, porque todo es bueno en mi caso y nada lo bastante superfluo.Quiero vivir todas las vidas , todas mis vidas, con intensidad y a la vez desapego.


Sufro hacia Hawi; soy feliz desplegando mis alas , a la vuelta, entre Kaupulehu y Makalawena, aunque a menudo el viento frontal me torture. A veces miro hacia el suelo y aprieto fuerte los dientes, imaginando el gentío ,la apoteosis allá, junto al Kailua Pier, directo hacia el tercer acto.

lunes, 22 de octubre de 2007

El día esperado, (III)

Cañonazo. Fuego en la mañana. Veo mil burbujas, huracán desatado. Siento desniveles, montañas en forma de ola y un horizonte de brazos. El agua me abraza , me envuelve y lucho por crearme un vacío líquido. Siento más oxígeno que otras veces en mi pulmones y mis brazos abren camino. Sólido y flexible.

Sólido: los brazos como piedras inamovibles, como monumentos , indestructibles, pétreos.

Flexible: Escurridizo, como la anguila, inteligente, en búsqueda de mi burbuja, maleable, como goma, ajeno a la batalla.

Eso pienso , sigo adelante y sigo en paz, me proyecto hacia adelante, busco el barco a lo lejos, Estilo laborioso. Los aduladores dirían que tengo un nado voluntarioso. Lo se. Pero aún así, sigo en paz, me fundo con el océano y busco la playa.

He nadado y mi fuerza no reside en los brazos; nace del alma, como el amor.

Foto: Mili González

domingo, 21 de octubre de 2007

El día esperado, (II)


Este amanecer viene de lejos; de muy lejos, como un velero enmedio de la nada. Sombras estiradas, infinitas, emocionantes, se recortaban en el horizonte, cada una de ellas con una gran historia, un nombre. Leyenda en cada cuerpo esculpido por el cincel del esfuerzo; músculos ahora en vigilia, alerta, expectantes.





En esos momentos, sentía mucho. Me imaginaba a mis seres queridos muy lejos , pero pendientes de mi. Tumbado junto a otros compañeros, en el cálido suelo al borde del océano, aguardaba. Soñaba. Pensaba si al día siguiente, en el suelo, seguirían mis huellas perdidas, y en el fondo de las mismas, aquellos granos de arena.





Cierro los ojos. Visualizo 140,6 millas, intentando sentir paz. Lo consigo. Abro los ojos. Entre las montañas y las palmeras, veo sonreir la gracia del cielo en forma de sol. Yo quisiera, ahora, estar allá arriba, ver todo desde allí... pero sigo aquí. La sombra coquetea con la luz y , todos, estamos preparados.








sábado, 20 de octubre de 2007

El día esperado, (I)





Me he sacrificado

He perseverado

Estoy preparado.


Este fue mi mantra. Me lo repetía una y otra vez. Había deseado mucho volver allí, sentir la atmosfera única, el olor especial de Kona. Nunca pensé cuando me marchaba en el 98 que, por un lado, me costara tanto volver, y por otro, que deseara tanto hacerlo.


Desde el 2004 he vivido con Hawaii de nuevo en mi cabeza y hasta este 2007 no conseguía llegar aquí. Por eso, cada instante, cada sensación, cada novedad, he tratado de vivirlas al máximo y por supuesto el día 13 de octubre era ese día tan especial y esperado.
El colofón de gran parte de mis sueños de triatleta están en esta carrera. Esta prueba es grandiosa, diferente, inexplicable. No puedo hacer una crónica, ni debo, pues no sería capaz de explicar el aluvión de sentimientos y sensaciones vividos. Trataré de hacer más gráfico mi día con imágenes y comentarios.
Cada día , un poco de lo vivido. Ahora, la mente todavía duda después del largo viaje de vuelta.

jueves, 11 de octubre de 2007

Horas definitivas

Ya solo quedan dos dias, dos dias para la prueba mas importante del Planeta.

Si alguna vez en mi vida pense en dejar de hacer deporte, dejar el triatlon, es aqui donde me doy cuenta de que eso es imposible, aqui se justifican todos los esfuerzos de la vida, los entrenamientos en solitario y la incompresion, a menudo, de tu entorno. Estar aqui es , como para un nino, estar en DisneyWorld.

El dia de ayer fue ya muy tranquilo, como lo seran los proximos. Un poco de bici por la Highway, muy relajados, para hacer algunas fotos y un pequeno video en la Entrada del Energy Lab;una carrera posterior de 20 minutos bajo un sol abrasador.

Hoy me desperte muy temprano, sobre las cinco a.m. y a las siete ya estaba en las calidas aguas del Pacifico despertandome del todo. Para hacerlo totalmente, nada mejor que nadar hasta un tipico trimaran polinesio, a unos 700 metros del Pier, y alli degustar un vaso de Gatorade, o un cafe expreso, alli en medio del Pacifico, sin salir del agua, esta es una de tantas experiencias increibles que pueden aqui vivirse; nada mas tomar el cafe, vuelta al muelle , totalmente repleto de inquietos triatletas de todo el orbe, que apuran sus entrenamientos.

Hoy, en el desayuno, ni mas ni menos que cuatro leyendas del Ironman tomaban cafe en una mesa contigua, dos de las parejas mas afamadas del multideporte: Paul Huddle y Paula Newby, y por otro lado Roch Frey y Heather Fuhr. Ellas, vencedoras aqui, Heather en el 97 y Paula, la IronLady, en ocho oportunidades. Ya retiradas, disfrutan de estos dias viviendo Hawaii , viendo los toros desde la barrera.

Para esta tarde, uno de los ultimos ritos, la cena de la Pasta, manana check-in y los nervios a flor de piel.

Aloha.

martes, 9 de octubre de 2007

Cuenta atras

Hay muchisimas cosas que contar, pero seria necesario ir poniendo en orden las ideas. Eso lo hare al regreso, ahora son muchas emociones para organizar la mente.

Hace pocos minutos volvimos al Pacifico a nadar, y el gentio es ya totalmente increible. Hay triatletas en todos sitios y la intensidad es indescriptible. Ahora ya hay que procurar escucharse mas a si mismo si cabe y no dejarse llevar por el corazon y obedecer mucho a la mente.

Mas espanoles: Iban Rodriguez, Pontano o el timido y serio Eneko, con los que hemos charlado unos minutos en el Pier. Lo mas bonito han sido los minutos antes de nadar junto a Macca, un tio simpatiquisimo y accesible, como son casi todos los australianos. Carmelo, el dia antes, lo conocio montando en bici por Alii Drive y llego al apartamento sorprendido por la accesibilidad y buen caracter del favorito a priori. Nos hemos fotografiado con el.

Hoy, tan solo trotare unos veinte o veinticinco minutos antes del mediodia, pero antes hay que ir a por el dorsal al Hotel King Kamehameha, centro neuralgico del IM. Por la tarde, uno de los momentos mas importantes y emotivos, la Parada de las Naciones, nosotros estamos animando a todos los espanoles a participar y pasar un buen momento bajo los colores de nuestro pais, con orgullo, como asi lo hacen americanos, ingleses, alemanes, australianos...pero ya se sabe, Spain is different. Pero Carmelo y yo si nos consideramos fervientes y orgullosos patriotas y...alli estaremos.

Ayer, paseo en barco por la tarde por la Kona Coast, con los chicos de Hannes, cena y buenos momentos en el oceano con Ironjavi y Amalia.

Buenos momentos, pero tambien concentracion y determinacion. La cuenta atras ya ha comenzado.

lunes, 8 de octubre de 2007

Ready to the Big Day

Hace dos dias que estamos en Kona Carmelo y yo. Largo periplo hasta llegar aqui. Lo mas duro fue pasar la noche en blanco en Honolulu, tirados en el aeropuerto, sin poder conciliar el sueno toda la noche y , totalmente emocionados, vislumbrar con las primeras luces de la manana la costa de Kona y aterrizar a eso de las 6.20 a.m. en el aeropuerto y besar el suelo de la tierra prometida; esto evidentemente no fue lo mas duro, lo duro fue llegar hasta aqui.

Sin tiempo nada mas que para dejar las pertenencias en el Hotel Kona Bay, a dos minutos caminando del Pier, nos encaminamos casi emocionados, abrazandonos para darnos cuenta de que estabamos alli, al muelle para completar casi dos mil metros en el agua. Alucinados. Esa es la palabra para expresar los sentimientos en ese momento, buceando en las calidas y transparentes aguas, entre tortugas y peces de colores.

La adaptacion fue dura, el jet lag nos abrazaba, pero ya casi lo hemos superado. He pedaleado por la Queen K, ayer hasta 3 horas, cruzandome con los grandes mitos y corriendo por Alii Drive, tomando cafe en el Lava Java, el Hula Bean o cenando en Basil. La ambiente es indescriptible, y va creciendo con los dias a medida que la prueba se acerca.

Sudamos mucho, dormimos sobresaltados a menudo en la madrugada por el cambio horario y ya hemos estado con muchos espanoles:sobre todo con Javi Garcia, Ironjavi, y su mujer Amalia, con los que compartimos grandes momentos. Pero tambien hemos estado con Alba Xandri , Guillem Llado , Marcel Zamora, Ignacio Escribano , Nico Ward e Ismael Pitti.

Hoy, ya nadamos m'as de dos mil metros en mar abierto, alejandonos casi fuera de la Bahia en un oceano movido. Esta tarde tenemos cena en el barco con los de Hannes Hawaii Tours, y hasta el dia D, entrenamientos suaves, buena comida, relajacion y concentracion. Y claro, algunas compras.

Las fotos, a nuestra vuelta.

Un abrazo a todos. Mahalo.

miércoles, 3 de octubre de 2007

El largo viaje.




El largo viaje es el final, y también el principio. Es el final de un largo proceso, mucho entrenamiento,y muchos nervios antes de la clasificatoria, en mi caso Lanzarote; siempre digo que clasificarse es lo más duro. Una vez con tu slot te tomas las cosas con calma, tratas de disfrutar al máximo y el verano es una estación maravillosa, llena de matices y sensaciones; todo un estío para entrenar y deleitarte, con la sensación de haber hecho bien los deberes.



También es el principio; porque una vez en Kona, la vida es distinta, es como hacer un paréntesis en tu vida y recibir un gran premio de fin de curso, es el regalo a montañas de esfuerzo.



Mañana me voy; observaré bien mi entorno, mi casa , mi cafetería y mis parques, porque se que a mi vuelta todo será un poco distinto, ni mejor ni peor, simplemente diferente. Mi espíritu seguramente estará en paz. Será el final de una etapa de mi vida, pero también será iniciar cualquier nuevo largo viaje con el que ilusionarse.






Ha habido gente que me preguntaba por qué volver alli. Es sencillo. La primera vez que fui a La Meca era un triatleta bisoño, con muy poca experiencia, y había bebido poco de las fuentes de la épica y mística de los Hombres de Hierro. Ahora, diez años después, si me siento preparado para ir. Entonces fue un regalo, aunque me lo ganara a pulso. Ahora, es un premio.

Quiero antes de irme dejaros algunas imágenes de la historia , muy viva siempre , de Hawaii. De arriba a abajo, Lynn Brooks, la mujer con más camisetas de finisher en Kona; Mike Pigg, uno de los grandes, aunque no del grupo de los Big Four; una de las victorias de Dave Scott, "The Man", cuando cazaba a un dubitativo Mark Allen caminando. O por último, una de las grandes reinas de Kona volando bajo en la bici: Natasha Badmann.
Intentaré contaros más historias y leyendas desde la misma lava.





lunes, 1 de octubre de 2007

Ultimos días.




Los días pasan, despacio, pero no tan despacio como cabría pensar. Los últimos entrenamientos no son interminables; tal vez porque sigo gozando entrenando. Este es un Ironman para vivir emotivamente, sintiendo muy dentro todos los momentos.




Es distinto, sin duda, al del 98. Entonces yo era una isla en medio del océano. Nadie sabía en mi cuidad qué era eso del Ironman. Bueno, tal vez entonces muchos comenzaron a saber de la existencia del deporte triple y muchos entonces se subieron al tren, comenzaron a entrenar y ahora me arropan. Muchos entrenan conmigo y otros están y estarán pendientes.




El domingo corrí el medio marathon de mi ciudad, Talavera. Tranquilo, para acumular kms. y hacer el último "largo" de la preparación. Me di cuenta de que mucha gente me conoce y me anima, muchos saben que en unos días me voy a EEUU y que tomaré parte en la mítica prueba de Hawaii. Hace diez años eso era impensable.




Sara corrió y lo hizo muy bien, tercera absoluta, al final de la prueba posaba junto a otro Ironman, Ricardo, ahora en el dique seco pero amenazando con volver.




Lo dicho, Hawaii será una prueba muy emotiva, porque en cierta manera no será solo mi triatlon, sino el de mucha gente que corre conmigo. Como testimonio de lo que digo, la bandera que me han entregado mis cadetes y juniors del Tritalavera, pintada por ellos con algunas de mis "frases míticas" como ellos dicen y con sus gritos de ánimo plasmados. Intentaré entrar con ella en meta para que ellos también lo hagan, eso si, si Carmelo está en el momento adecuado y en el sitio justo para entregármela, allá, en el Alii Drive , mientras muchos de vosotros estaréis dormidos y otros muchos pegados a la pantalla de un ordenador.