30 días para el Campeonato del Mundo Ironman.
A lo largo de esta serie de entradas, pequeños retazos de lo que entraña estar allí, en el centro del universo triatlético, los dias previos y posteriores a ese primer sábado de luna llena de octubre.
Una de las experiencias más intensas y vivificantes es nadar cada mañana en las aguas de la bahía de Kona. Lo mejor es madrugar para acostumbrarse al horario de competición , ya a las siete de la mañana, con el sol iluminando con fuerza, el Pier es un verdadero hervidero de triatletas.
Aguas cálidas,limpias, claras, llenas de vida que invitan a excederse entrenando; hay que controlar el ímpetu,tratando de ajustarse al programa.
Lo mejor, sentirse parte de la vida que te rodea, peces de cientos de formas , colores... y hasta tortugas que nadan cualquier mañana a tu lado. Una experiencia a la que nadie podría abstraerse.
Un circuito balizado semanas antes en el que casi todos allí hemos entrenado de más.
Algo tendrá esa bahía que nos ha hecho sentir tan vivos.
2 comentarios:
Por lo que parece, un paraíso.Estaré muy atento a tu guia de Kona, seguro que aprenderé muchas cosas para el día que yo vaya, jeje.
Felipe-
Ya le he pedido la cámara acuática a Carmelo, imaginando lo que me espera allí, espero tener tiempo de colgar un vídeo diario de mis andaduras por allí, desde mi partida desde Gran Canaria "La Isla Redonda". Como un diario, para que podaís seguir la andadura de un grupo de edad que somos los que le damos salsa a ésto jejejejeje.
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