Hoy, primera jornada del Campus. Este año, y como novedad, cada día el programa detallado a mi manera: manuscrito y con un toque informal. Mejor que impreso tras teclearlo... a los chicos los gusta más así.
Sol, buen ambiente, magnífico diría yo, somos un equipo, aunque muchos de los habituales no hayan podido venir, pero los recién llegados alcanzan el notable como mínimo, tanto a nivel humano como deportivo; ese tal vez sea el gran secreto de nuestro Campus.
Un buen puerto y bellísimos paisajes para comenzar, la isla nos ha recibido con un bellísimo color verde. El Alto de Fataga es uno de los platos fuertes de la concentración y este año lo hemos incluido en el primer día. Hay que decir que todos los integrantes de la concentración han entrenado bien y pasado la jornada con buena nota.
Casi lo mejor, por no decir lo mejor, ver a los viejos amigos, compartir esfuerzo con ellos. Amigos que se reencuentran para pasar buenos momentos, olvidando el a veces malgastado invierno y alimentando ilusiones que nunca se acaban de apagar.
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